El Ayuntamiento de Alcobendas ha licitado una de las infraestructuras sanitarias más esperadas para los vecinos de La Moraleja, que hasta ahora, tienen que desplazarse a Sanchinarro o al Hospital Universitario Infanta Sofía o bien a La Paz. Es decir, tienen que recorrer una distancia mínima de 10 kilómetros en la zona más exclusiva de la ciudad de Madrid, dado que las clínicas de la zona dan en su mayoría asistencia ambulatoria.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda al menos 2,5 camas hospitalarias por cada 1.000 habitantes y al menos 23 especialistas por cada 10.000 habitantes. En Alcobendas no se cumplía esta recomendacion y la alcaldesa, Rocío García, ha puesto manos a la obra al ceder suelo público para que los grupos hospitalarios puedan edificar uno. El de Alcobendas será un hospital acorde a las necesidades, con una licitación que podrá alcanzar los 57 millones de euros, unos 44,38 millones de euros sin impuestos.
El hospital privado que se levantará en Alcobendas tiene efectos directos para quienes tienen contratado su seguro privado, al disponer de una asistencia rápida y más cercana de lo habitual, ahorrando tiempos de llegada y atención. Estos beneficios se trasladan también al mercado inmobiliario. La proximidad a un hospital puede revalorizar la zona entre un 5% y un 10%, dependiendo de las especialidades, pero también de una mayor demanda en la zona, especialmente de los facultativos y personal del propio hospital.
SALARIOS ALTOS Y UN PÁRKING PARA 600 VEHÍCULOS
La nueva infraestructura sanitaria estará dotada con un aparcamiento para 600 vehículos, mientras los salarios del director y las altas esferas del hospital, junto con los sueldos de los propios facultativos, oscilan entre los 7.000 y los 13.000 euros brutos al mes, es decir, entre los 84.000 y 156.000 euros, suficientes para poder buscar vivienda en alquiler en La Moraleja, El Encinar de los Reyes e incluso otear La Solana, que tiene previsto edificar una gran promoción de 1.300 viviendas.
Según los simuladores hipotecarios, con esos sueldos se podrían permitir altas hipotecas cercanas a los dos millones, sin contar con posibles inmuebles e inversiones, así como cualquier otro patrimonio, pero sí con más de 400.000 euros en el banco para poder hacer frente desde cero a cualquier préstamo para los precios que se están exigiendo de media en las tres urbanizaciones.
La cercanía de un centro hospitalario, más allá de las clínicas, puede ser un incentivo para incrementar la demanda inmobiliaria en la zona y repercute directamente en el valor de la vivienda
Asimismo, por el alquiler mensual del Hospital se ingresarán 13,92 euros con IVA, mientras que por plaza de párking alcanzará los 225,06 euros con IVA. Además, el complejo dará unos beneficios a Alcobendas de un millón de euros en 2037 para alcanzar los tres millones en 2046, según las previsiones de la cesión que se adjudicará próximamente.

La cercanía de un centro hospitalario, más allá de las clínicas, puede ser un incentivo para incrementar la demanda inmobiliaria en la zona y repercute directamente en el valor de la vivienda, más en un tiempo en el que escasean los inmuebles por el lado de la oferta y apenas hay suelo edificable en la zona. En El Encinar de los Reyes, por ejemplo, no queda ni un metro cuadrado libre para poder comprar el suelo y edificar la casa de los sueños del propietario.
El nuevo hospital se levantará a solo dos kilómetros del club de tenis del Soto de La Moraleja y a tan solo 3,5 kilómetros del Real Club de Golf de La Moraleja. Además, estará ubicado a tan solo a 2,5 km del centro de El Encinar de los Reyes. Este hospital privado podría cubrir las necesidades de los más de 12.000 habitantes censados en La Moraleja, El Soto de la Moraleja y el Encinar de los Reyes, pero además, podrá sumar los de La Solana, la nueva urbanización que se levanta el norte de la capital y pegando junto a La Moraleja. En total, se levantarán 1.300 viviendas.
SANT CUGAT, UN EJEMPLO EN LA REVALORIZACIÓN DE VIVIENDA POR UN HOSPITAL
En Sant Cugat, por ejemplo, se instaló el Hospital General en 1984, generando no solo valor al suelo más próximo, con restricciones y prohibiciones de uso, sino también al municipio en su integridad. Es uno de los hospitales de referencia de las afueras de Barcelona y da servicios a miles de ciudadanos que no tienen un centro público más próximo.
Lo mismo ocurre con Alcobendas y La Moraleja. Los pacientes deben recorrer decenas de kilómetros -ida y vuelta- para poder ser atendidos. En Sant Cugat, el centro público más cercano se encuentra en la ciudad de Barcelona, a más de una hora en transporte público o bien 15 kilómetros de la Ciudad Condal, también pueden acudir a Sabadell, al Taulí, pero la masificación es de tal magnitud que la espera en urgencias alcanza las 10 horas, tal y como ha podido comprobar esta misma Semana Santa este medio.
Asimismo, al tratarse de un hospital es de suponer que los esperados accesos a Alcobendas mejoren, como también el servicio público, como el transporte en autobús, que podrían empujar al alza las viviendas de la zona y las más próximas a las paradas. Como en todo, la reputación del hospital será también una de las cuestiones clave, pero se entiende que al ser privado lucharán por esta licitación las principales cadenas hospitalarias y aseguradoras, cuya reputación goza de muy buena salud en este momento.
Eso sí, la intensidad del tráfico y el ruido serán dos factores a tener en cuenta a la hora de poner el precio de mercado. Las viviendas más próximas al complejo podrían reducir su valor si los ruidos provocaran un impacto en el descanso vecinal. Y es que, normalmente el hospital está acompañado de empresas y servicios para poder complementarlo.